Bizcotelas, el sabor de la historia en Confitería Rufino

Hay sabores que nos llevan a tiempos lejanos, que nos acercan a personas cercanas o que ya no nos acompañan, que nos sacan una sonrisa con tan sólo el primer bocado…. En Confitería Rufino sabemos bien de lo que hablamos. Nuestra amplia variedad de pasteles artesanos son el claro ejemplo del respeto por unas recetas que, bien son las mismas o bien se han ido mejorando desde que abrimos nuestras puertas, en 1875.

Para nosotros no hay mejor halago que cuando un cliente nos dice con sincera emoción lo mucho que le recuerda este u otro pastel a momentos personales, íntimos y de gran importancia en su vida. Curiosamente, hay una de nuestras especialidades que trae consigo este tipo de comentarios: las bizcotelas.

Esta especialidad de Confitería Rufino es uno de los pasteles históricos de nuestra carta, tan cargado de dificultad en su elaboración que sólo está presente en nuestras vitrinas de Aracena, Valverde del Camino o Sevilla previo encargo.

Las bizcotelas de Confitería Rufino son una base de bizcocho bajo en azúcar, relleno con una fina capa de yema de huevo y cubierta con glasa imperial… hechas de forma totalmente artesana, una a una y con especial mimo en su envoltura final.

No en vano, este último paso es uno de los más laboriosos en nuestro obrador, donde hace falta la mano experta y delicada de nuestros Maestros Pasteleros para que el fino acabado de la bizcotela siga siendo el mismo de siempre, y con su hilo de canela molida diagonal.

La bizcotela es una seña de identidad de Confitería Rufino, tanto por su inmaculada presencia como su intenso sabor, recuerdo de otros tiempos que ahora los abuelos y abuelas, padres y madres se encargan de mostrar por primera vez a los más pequeños, de manera que la cadena siga viva de la mano de algo tan nuestro como el dulce artesano elaborado con la mejor materia prima y todo nuestro corazón.